“EL GRITO EN EL CIELO” de LA ZARANDA – Teatre El Musical

Llega al Teatre El Musical, una gran ocasión para disfrutar en Valencia de un teatro para paladares exigentes y de la poética escénica de La Zaranda con “El grito en el cielo”, la última creación de la compañía andaluza, hilvanada en agosto en la Biennale de Venecia y estrenada en noviembre de 2014 en el Festival Temporada Alta de Girona.

“El grito en el cielo”, escrita por Eusebio Calonge, bajo dirección de Paco de la Zaranda, cuenta con la interpretación de Celia Bermejo, Luis Enrique Bustos, Gaspar Campuzano, Iosune Onraita y Francisco Sánchez.

Una trayectoria teatral de casi 40 años ha convertido La Zaranda en una compañía de culto, no solo a España sinò especialmente a América Latina. Este grupo andaluz de prestigio internacional ha representado obras en más de 30 países y ha recibido decenas de galardones, entre los que destaca el Premio Nacional de Teatro.

“El grito en el cielo”, es una reflexión construida alrededor de unos personajes viejos y enfermos, desvalidos al final de sus días pero que no se resignan a la defunción pautada que les han asignado. Quieren, a pesar de a pesar de sea como sea, huir. Seres extraviados que no han perdido la esperanza, que tratan de escaparse de una situación que los atrapa y emprenden un viaje de vuelta a la libertad, a la vida.

Una vez más, con su humor crudo, imágenes potentes y una puesta en escena que transforma los espacios con cuatro elementos, La Zaranda conmueve e impacta, vuelve a dar una lección de teatro hablante de un mundo deshumanizado que aniquila cualquier tipo de trascendencia.

Sinopsis:

Estos destinos que acaban el peregrinar de sus vidas fueron depositados como órganos deteriorados en este geriátrico aséptico, sin más esperanza que la sedación paliativa que los desintegre en la nada.

Los tratamientos, las sesiones de rehabilitación y terapias (entre ellas, las artes como ejercitación corporal o entretenimiento) ocupan rutinariamente el ocaso de sus días.

Sin embargo, de esas vidas reducidas a mecanismos orgánicos no han podido abolir totalmente la contraindicación de soñar. Y algunos deciden desertar de la defunción médicamente certificada, intentando una escapada más allá del horizonte material que clausura su tiempo, emprendiendo un arriesgado viaje hacia la libertad perdida que les hace recuperar la fe como dimensión humana. Vivir en la intemperie del alma.

Una obra que conforma con la anterior, El Régimen del Pienso, una ácida crítica a un mundo deshumanizado y sin trascendencia, donde los historiales clínicos suplantan toda biografía y el arte, mutilado de su sentido espiritual, es un engranaje más de esa maquinaria de aniquilamiento.