El público de Polinyà Íntim se vuelca en la memoria histórica y en la España vaciada
La tercera edición del festival Polinyà Íntim, celebrado los días 5 y 6 de octubre, ha registrado sus mejores aforos en los espectáculos pegados a los debates más candentes de la política española actual: la memoria histórica y la España vaciada.
La entrega, del Col·lectiu La Santa (Barcelona) sobre el duelo que afronta una familia cuando su hijo es robado en la posguerra, y Yo no puedo olvidarla, un ejercicio de rescate del olvido de los relatos que le contaban a Ángela Bermúdez (València) sus abuelos, han tenido llenos en sus funciones.
También se vendieron todas las entradas de los tres pases de Las mañas, de Las Mañas Teatro (València), sobre tres hermanas ya mayores y solteras que nunca han salido de su pueblo, ahora abandonado, y casi cubrió el aforo de sus tres representaciones Piedra y encrucijada, de Companyia Hongaresa de Teatre (Puerto de Sagunto), ambientada en un cruce de caminos en Teruel, provincia insignia de la revuelta de los territorios afectados por la despoblación en nuestro país.
“Las artes escénicas son un reflejo de la realidad y en Polinyà hemos programado obras que a través del análisis y de la recreación ayudan a los espectadores a reflexionar sobre los temas que más les preocupan. En estos momentos los principales quebraderos de cabeza en nuestro país son la controversia por la exhumación de Franco y el paro de tres minutos de silencio celebrado en las zonas más despobladas para exigir atención de las Administraciones”, ha explicado el director artístico del festival, Jacobo Julio Roger.
OBRAS PREMIADAS Y OBRAS FORÁNEAS
La principal novedad de esta edición ha sido la programación de compañías de fuera de la Comunidad Valenciana: La entrega, de Col·lectiu La Santa, de Barcelona, y la frenética comedia Clavileño e hijo: El 7D, de los madrileños Territorio Violeta.
El director del festival también ha destacado como un hito del festival la programación por primera vez y por partida doble, con Las mañas y Piedra y encrucijada, de uno de los principales dramaturgos de la Comunidad Valenciana, Paco Zarzoso, que esta misma semana se marcha a Córdoba (Argentina) para representar Piedra y encrucijada en el Festival Mercosur.
En total, en el municipio de la Ribera Baixa se han representado nueve propuestas de artes escénicas y una acción dramática. Entre las piezas, había dos galardonadas: Las mañas, que se alzó con el Premio Íntim 2019, con apoyo de la SGAE, y Shhhh!, de Marián Villaescusa, premio SGAE – Russafa Escènica en la pasada edición del festival.
Polinyà Íntim es una apuesta por descentralizar la cultura. Esta edición, con el cambio de fechas de marzo a octubre se le ha dado además cariz de arranque de la temporada teatral. Una vez más el pueblo se ha volcado tanto con su asistencia a los espectáculos como abriendo sus casas para albergarlos.
“Esta propuesta singular brindar una oferta cultural asequible y de calidad a los vecinos, al tiempo que pone en valor el patrimonio arquitectócnico del municipio, pues los espectadores pueden acceder al interior de casas modernistas de la burguesía agrícola valenciana de finales del siglo XIX”, ha valorado Jacobo Julio Roger.
