GALA XX ANIVERSARIO de ARDEN TEATRO
La compañía valenciana Arden, impulsora de Sala Russafa, celebró anoche una gala donde recordó junto a una amplia representación de la escena valenciana, sus 20 años en activo dedicados de pleno al teatro.
Destacados profesionales que ya forman parte de la historia de Arden, fueron los encargados de conducir un repaso por su trayectoria.
Un acto sencillo, con brindis y tarta incluidos, al que asistieron representantes del mundo del teatro y la cultura que han contribuido a que Arden siga activa y presente en los escenarios: profesionales de las artes escénicas, gestores culturales, críticos, representantes institucionales…..
Fundada en 1995 por Juan Carlos Garés y Chema Cardeña, en dos décadas Arden se ha convertido en una de las compañías más estables de la escena valenciana, con una propuesta artística definida y con el apoyo del público y de la crítica.
Un vigésimo aniversario que es “casi un milagro” y que este año comparten con otras formaciones como El Micalet, Albena Teatre o La Hongaresa, que también surgieron coincidiendo con el desmantelamiento de Centro Dramático de la Generalitat Valenciana.
Para festejar sus dos décadas en activo, Arden inauguró el 16 de abril una muestra en Sala Russafa en la que recorren su trayectoria a través de fotos, carteles, vestuarios y recortes de prensa.
La suya es una mirada al frente desde el pasado, retomando personajes históricos, autores y estilos del teatro clásico para hacer un retrato del presente, de nuestro entorno, de las pequeñas luchas cotidianas de mujeres, artistas, poderosos y de quienes se enfrentan a las sombras del poder.
Arden celebra su XX aniversario, dos décadas en las que ha puesto en pie más de 20 espectáculos en los que han recreado figuras históricas como William Shakespeare, Isabel La Católica, Molière, Velázquez, Casanova, Sócrates o Robespierre, entre otras. Protagonistas de piezas que combinan realidad y ficción, ofreciendo nuevas interpretaciones sobre nuestra Historia a través de pequeñas historias donde, como en el día a día, se entrelazan el drama y la comedia.
Una compañía que ha creado un carácter propio en producciones como La estancia (1996), La puta enamorada (1998) y El idiota en Versalles (1999 y 2009), que conforman la Trilogía del Teatro Clásico Europeo. El banquete (2000), La reina asesina (2002) y El ombligo del mundo (2004) se incluyen en la Trilogía Helénica. Para la Trilogía del Mal, todavía por completar, crearon RIII (2005) y Hotel Venezia (2006). La mirada más directa a la actualidad contemporánea llegó con la Pentalogía Teatre de Hui, que incluye Réquiem (2001), El Xanadú (2003), Contratemps (2006) y De Hiroshima y Nagasaki (2010).
La Recreación Histórica vino con las piezas Clandestinos (2008), Sueña Casanova (2011), Las Rameras de Shakespeare (2012), Revolución! (2013) y Matar al rey (2014), que ha sido llevada al formato cinematográfico por el realizador Vicente Monsonís. Otra faceta ha sido la Investigación Escénica, con montajes como Muladar (2007), 8 Reinas (2011) y la reciente Alicia en Wonderland (2014). Y han creado tres montajes para el público familiar, Un soldadito de plomo (2011), Gatacienta (2012) y El Ruiseñor del Emperador (2013).
Una larga trayectoria en la que han mantenido una coherencia estética y creativa. Arden ha instaurado un sello de autor, reconocible en la puesta en escena de piezas que transitan todos los géneros y que no cesan de evolucionar, incorporando la música en vivo y la danza en sus últimos montajes, pero preservando siempre la primacía del texto y del trabajo actoral porque Arden nace y crece de la mano de dos actores.
Antes de que Juan Carlos Garés y Chema Cardeña se conocieran, la gente los confundía. A uno le decían lo bien que había estado en un papel que había interpretado el otro. Y al otro que lo habían visto en un festival en al que, en realidad, había acudido el uno.
Ese parecido razonable inspiró a Cardeña para escribir un borrador del primer acto de una obra. Finalmente, en 1995 ambos se encontraron en un curso de interpretación impartido por el director de escena británico Michael McCallion. Allí confluyeron todos los elementos del germen de Arden: el borrador se transformó en La Estancia, el primer espectáculo de la compañía, dirigido por McCallion, en el que Garés y Cardeña subieron juntos por primera vez a las tablas, dando vida a los dramaturgos Marlowe y Shakespeare en una trama en la que ambos se aprovechaban su parecido físico y en la que se mostraba una perspectiva sobre estos personajes históricos nunca antes vista.
El éxito de crítica y público fue inmediato. Veinte años más tarde, Garés y Cardeña siguen sobre el escenario. Y la gente aún les sigue confundiendo.
En el camino, han contado con la colaboración de grandes profesionales de las artes escénicas valencianas, nacionales e internacionales, como el citado McCallion, Carme Portaceli, Vicent Vila, Carles Alfaro o Josep Solbes, entre muchos otros, ya que sólo la lista de actores que ha intervenido en sus montajes incluye a nombres destacados de la escena valenciana como Amparo Vayá, Toni Aparisi, Juan Mandli, Josep Manel Casany, Ruth Lezcano, Rosa López, Jerónimo Cornelles, Pascual Peris, Álvaro Báguena, Enric Juezas, Rafa Alarcón, Iria Márquez y un larguísimo etcétera.
Con el paso de los años, se ha unido a la base de la compañía el músico David Campillos, socio, coordinador de giras y responsable de la programación musical de Sala Russafa. Precisamente este centro cultural en el barrio valenciano de Ruzafa, uno de lo más inquietos de la ciudad y donde se asienta la compañía desde sus inicios, es otra de las grandes incorporaciones de Arden.
En 2009, siguiendo la evolución natural de la compañía, se arriesgaron a poner en marcha la construcción de un espacio de 2.000 m² destinado a la creación, exhibición y docencia de las artes escénicas. Tras varias fases de obras, la antigua nave de una empresa de material industrial se transformó en Sala Russafa, un espacio polivalente que tuvo su primer contacto con el público en febrero de 2011.
Desde entonces, ha mantenido una intensa actividad productiva y formativa, además de una programación variada y regular que da cabida a los espectáculos de la compañía, pero también a los de otras formaciones valencianas y nacionales, procurando dar visibilidad a propuestas que tienen pocas oportunidades de exhibirse en el teatro público valenciano, como las de Atalaya, La Gotera de Lazotea, Producciones Imperdibles, Teatro Noctámbulo, Histrión Teatro o Factoría Escénica Internacional, por citar solo algunas.
MILAGROS, RETOS E ILUSIONES
Cumplir dos décadas de supervivencia en una escena como la valenciana, más que un reto, es casi un milagro. Y se debe, en gran parte, a la buena acogida de las propuestas de Arden entre el público, los profesionales del sector, la prensa y los críticos. Un apoyo por el que la compañía está inmensamente agradecida y que se ha materializado en más de 70 reconocimientos entre los que se incluyen el Premio a la Mejor Dirección Escénica en el XXXII Certamen Nacional Arcipreste de Hita, el Premio de la Crítica de Barcelona y la nominación a los Premis Butaca de los Espectadores de Barcelona (en la categoría de Mejor Texto), a los que se añaden numerosas nominaciones y galardones obtenidos en los Premios Abril de los Profesionales de las Artes Escénicas de la Comunidad Valenciana), en los Premios de las Artes Escénicas de la Generalitat Valenciana y en los Premios Max Aub (en la categoría de Mejor Texto).
A todos ellos hay que sumar dos galardones en la 30ª Mostra Internacional de Titelles a la Vall d’Albaida (en las categorías de Mejor Interpretación y Manipulación de Marionetas) y los Premios a la Contribución cultural otorgados por La Cartera Levante y el programa radiofónico La Colina 45.
En 1995 Garés y Cardeña bautizaron a su naciente compañía con el nombre de Arden, un bosque junto a la ciudad natal de Shakesperare, Stratford-upon-Avon, del que hoy sólo queda en pie un árbol. Desde entonces, también se ha ido despoblando la cultura española y valenciana.
Pero, con más de 2.000 representaciones realizadas y unas 1.000 acogidas en su teatro, Cardeña, Garés y Campillos mantienen la ilusión por levantar el telón cada temporada y por seguir creciendo, evolucionando, a pesar de la recesión cultural en la que se enmarca su vigésimo aniversario.
Para el futuro inmediato, se ilusionan trabajando en la continuidad de Sala Russafa, en la creación de una nueva pieza en la línea de análisis político y música contemporánea marcada por las recientes Revolución! y Alicia en Wonderland, en la revisión de una de una figura emblemática de la historia española en una nueva obra para los espectadores más exigentes, los niños. Y, sobre todo, en la lucha por cumplir 21 años, 22, 23… todos los que su ímpetu, la coyuntura y (sobre todo) los espectadores, permitan. Porque están convencidos de que siempre hay una manera de levantar el telón.
Sala Russafa
Dirección: Calle Dénia, 55, Valencia
Teléfono: 963 41 52 16