LA NUEVA ESCENA VALENCIANA COGE IMPULSO DESDE EL TEM Y LA MUTANT
Un año más, los teatros municipales acogen los proyectos seleccionados dentro del programa de residencias del Ayuntamiento
Desde la puesta en marcha de sus nuevas programaciones a principios de año, La Mutant y el Teatro El Musical han ido acogiendo a los artistas y formaciones beneficiarios de las ayudas de residencias artísticas, concedidas un año más por el Ayuntamiento de Valencia a través de la concejalía de Acción Cultural. El principal objetivo de esta iniciativa sigue siendo la promoción de la escena valenciana, incentivando el trabajo de los creadores y creadoras emergentes y facilitando el desarrollo de espectáculos con una especial aportación social o cultural. Las ayudas abarcan todo tipo de disciplinas, y a la hora de valorar las distintas propuestas se tiene en cuenta la calidad artística, la innovación en los lenguajes escénicos, el compromiso social o la capacidad para generar nuevos públicos.
El programa de residencias del TEM comenzó a principios de febrero con Yo tardaré un poco más, una creación de María Guerra dirigida por Toni Agustí y basada en el proceso de investigación y escritura de un texto teatral sobre una adolescente que comete un parricidio; un montaje que tendrá una primera representación la próxima semana (martes 30, 18:30 h.) y que en mayo regresará a la sala como parte del festival Cabanyal Íntim. También desde febrero se ensaya Cuchillos de palo, una pieza de Iñaki Moral, Eva Zapico y Maribel Bayona que reflexiona sobre los conceptos de herencia y responsabilidad en un mundo al borde del colapso, y que podrá verse igualmente el miércoles 31 a las 18:30 horas en una muestra abierta el público. Además, la sala del Cabanyal-Canyamelar ha acogido durante estas últimas semanas proyectos como Erospheria, un trabajo de videoarte, danza y movimiento a cargo de Anna Estellés (quien crea una narrativa visual donde los nuevos imaginarios se transforman en diferentes paisajes que transgreden los imaginarios heteronormativos), o Save the Temazo, un espectáculo circense y musical del colectivo F.R.E.N.È.T.I.C. y la directora escénica Jimena Cavalletti.
Por su parte, La Mutant ha recibido dos residencias artísticas a lo largo del mes de marzo. Una de ellas es Vozoca, una propuesta desarrollada por Alba Murcia y Virginia Roig y centrada en cómo la vida en las ciudades nos mantiene alejados y ajenos a conexiones con nuestro cuerpo, perdiendo consciencia sobre nuestra propia materialidad y la materialidad del medio en que vivimos. La otra es Hospedar(nos), un proceso de investigación que surge a raíz de la imagen que la sociedad tiene de la juventud, y que lleva la firma de la compañía La Galguera. La muestra de Vozoca tendrá lugar el miércoles 31 a las 12 horas, con entrada libre hasta completar el aforo de 20 personas.
Para los coordinadores artísticos de ambos teatros, estas residencias desempeñan un papel determinante a la hora de potenciar la labor de los jóvenes talentos de nuestro territorio. Desde el TEM, Juanma Artigot destaca que “son fundamentales para lograr el objetivo de convertir los espacios escénicos municipales en espacios de creación que cohabiten con la exhibición, al tiempo que se crea un vínculo de respaldo y compromiso con la creación local. El foco se centra en el acompañamiento durante el proceso de investigación, y también en dar visibilidad a las propuestas para que tengan continuidad y sean desarrolladas posteriormente”. En La Mutant, Marta Banyuls suscribe las palabras de su compañero y añade: “Deseamos que los espacios municipales se conviertan en estructuras de creación capaces de albergar residencias de otras comunidades autónomas e incluso internacionales, expandiéndose más allá del ámbito local”.