Más de 11.000 dramaturgos y coreógrafos son socios de la SGAE

La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) tiene encomendada la labor principal de repartir el dinero generado por la comunicación pública de las obras teatrales entre sus socios. Además, asesora a los dramaturgos en lo que a la cesión de derechos de autor de sus obras se refiere. Dicha gestión depende exclusivamente de la decisión del propio autor; si bien la SGAE canaliza y acompaña al creador en esta toma de decisiones. Por otro lado, la entidad vela por el uso que hacen las productoras y compañías de las obras de nuestros socios, asegurando sus intereses no sólo económicos sino también en el plano de los derechos morales. 

La SGAE ha gestionado durante el año 2021 un total de 35.025 eventos dramáticos por todo el territorio español; lo que supone un 32% más con respecto a 2020, año en el que se administraron 26.442. Estos datos avalan la labor que la entidad realiza en el sector de las artes escénicas y la evolución que, tras la pandemia, viene padeciendo el mundo del teatro. 

Por lo que respecta al número de socios, la Sociedad cuenta con 11.135 socios de Artes Escénicas (9.456 son dramaturgos y 1.679 son coreógrafos). En términos globales, este colectivo representa un 9,58 % del total de socios SGAE.
 
Extraordinario talento
 
El presidente de la SGAE, el guionista y dramaturgo Antonio Onetti, ha querido referirse a la actual situación del teatro: “Estamos viviendo unos años extraordinarios, en lo que se refiere al talento de la dramaturgia creada en España. Distintas generaciones y distintas estéticas están siendo objeto de atención tanto por parte de nuestro público como por parte de programadores, directoras y académicos internacionales, siendo cada vez más frecuente la presencia de nuestro teatro en el panorama internacional.”  

El máximo responsable de la institución ha manifestado que la Sociedad General de Autores y Editores “no sólo impulsa y facilita la gestión de los derechos de los y las dramaturgas, sino que también les ofrece ayuda en situaciones complicadas y supone un soporte para la formación y la promoción”. 

“El teatro como espacio crítico de encuentro y esperanza”
 
En relación con la invasión rusa de Ucrania, Onetti ha subrayado: “En estos terribles momentos de conflicto armado debemos reivindicar más que nunca las artes y, entre ellas de manera muy especial, el teatro. El teatro como refugio (no es de extrañar que diferentes teatros estén siendo utilizados como refugio para civiles, pese a que alguno de ellos ha sido atacado) de libertad. Si las artes son siempre importantes, en tiempos de guerra resulta imprescindible -al menos para aquellos países que no estamos oficialmente en guerra- salvaguardar las artes y, entre ellas, el teatro, de todos los terribles efectos asociados a los conflictos militares, manteniendo así vivo un espacio crítico de encuentro y esperanza”.