‘Trabajos de amor perdidos’ transforma el escenario de la Sala Russafa en un tablero de ajedrez
La Sala Russafa retoma su ‘VII CICLE COMPANYIES VALENCIANES’, que desde el 26 de enero viene ofreciendo una selección de formaciones que trabajan la escena local y autonómica con propuestas diferenciadas, demostrando la riqueza de las artes escénicas valencianas.
Antes de pasar a la programación de danza, la última entrega teatral del ciclo llega, precisamente, de la formación Última Teatro, que recupera el montaje de Trabajos de amor perdidos (13-22 de abril), incluido dentro del pasado Festival de Talleres de Teatro Clásico del teatro de Ruzafa.
Esta versión del clásico de W. Shakespeare nació en el Taller de Teatro de Posgrado para Profesionales, impartido en el centro cultural y docente. Ahora, sus integrantes se han constituido en compañía para interpretar de nuevo el montaje dirigido por Chema Cardeña.
Cuenta la historia del príncipe de Navarra y tres de sus caballeros, Biron, Longaville y Dumain, quienes han jurado no querer ver a ninguna mujer durante tres años para dedicarse a una discreta vida de estudio y sobriedad. Sin embargo, la llegada de la princesa de Francia con una embajada para recobrar la Aquitania a favor de su padre, el rey galo, les obligará a infringir sus votos, consintiendo en recibirla junto a sus damas, Rosalinda, María y Catalina.
FUNCIONES:
Viernes 13 de abril a las 20:30h.
Sábado 14 de abril a las 20:30h.
Domingo 15 de abril a las 19:00h.
Viernes 20 de abril a las 20:30h.
Sábado 21 de abril a las 20:30h.
Domingo 22 de abril a las 20:00h.
Precio:
Entrada normal, 14€
12€ venta anticipada en la web del teatro, carnet de jubilado o estudiante y residentes en Ruzafa.
Descuentos especiales para profesionales y estudiantes de Artes Escénicas.
10€ para grupos de 10 personas, mínimo.
COMPRAR ENTRADAS: http://www.salarussafa.es
Con una banda sonora cantada en directo por el elenco – que incluye curiosas versiones de Frank Sinatra o Dean Martin, entre otros – avanza esta deliciosa guerra de sexos, plagada de equívocos. Y, para representarla, el escenario se convierte en una tabla de ajedrez en la que los personajes se mueven e interrelacionan siguiendo las reglas del juego.
Con esta original puesta en escena, se recrea el primer enfrentamiento entre hombres y mujeres escrito por el dramaturgo inglés, tema que trataría después en otras piezas como Mucho ruido y pocas nueces, Sueño de una noche de verano o Como gustéis. Una batalla de ingenio en la que los personajes femeninos ganan por goleada, proclamando su superioridad a la hora de entender el mundo y a quienes lo habitan.
Trabajos de amor perdidos es una pieza temprana y una de las más extravagantes e intelectuales de Shakespeare, donde apuesta por la naturalidad a la hora de relacionarse, de sentir y vivir las pasiones. Además, desmonta el falso compromiso con la cultura asociado a las clases altas de la época. Y dibuja cierta crítica social al retratar a los poderosos como soberbios, frívolos, torpes y atrapados en las apariencias, mientras que los campesinos son más prácticos y libres. Hasta el 22 de abril puede verse este canto a la vida, escrito a finales del SXVI, pero que retrata fielmente la necesidad de aparentar de la era del ‘selfie’.