Un meteorito impactará en las calles de Sueca dentro del marco de la 30 Mostra Internacional de MIM
La Mostra Internacional de Mim a Sueca (MIM) despliega su programación para el fin de semana con espectáculos sustentados en la libertad creativa al tiempo que reflexionan sobre las diferencias culturales, la empatía o la violencia, o abordan temas como el trabajo infantil o la cultura y las tradiciones valencianas. Y todo ello con calle como espacio escénico y vital.
Con el objetivo de conseguir un impacto sorprendente y transformador en el espacio público, la compañía catalana Campi qui pugui llega mañana por primera vez a la Comunidad Valenciana dentro del marco del MIM con Asteroid. Un meteorito impactará en las calles de Sueca y la policía desplegará su excéntrico equipo de científicos. Un espectáculo de humor absurdo y de títeres que afronta la forma de relacionarnos con aquello que desconocemos, las diferencias culturales y los marcos mentales que limitan nuestra capacidad para entender el mundo. Los espectadores de esta edición tan especial tendrán también la oportunidad de ver por primera vez en nuestra geografía Block, en el que los ingleses Motionhouse desconstruirán y reformarán en la Plaza de Sant Pere veinte bloques de gran tamaño en una infinita variedad de formas.
La galardonada compañía suecana Maduixa Teatre presentará por su parte este sábado su última producción, LÙ en el casal Multiusos. Con un título que en chino significa “camino”, se trata de un delicado y potente montaje que aborda el trabajo infantil a través de la danza e imágenes de gran belleza que crean un universo mágico y de fantasía que sirve de refugio a los más pequeños para poder afrontar y resistir la dureza de su vida cotidiana.
Los valencianos Titoyaya Dansa, plataforma de danza contemporánea creada hace más de una década bajo el principio de la libertad creativa, reflexionarán a través del movimiento sobre la empatía y la manera de relacionarnos en Social Animal. Y todo ello para mostrarnos en el espacio público que cualquier aspecto, en principio positivo y enriquecedor, puede ser el detonante de una explosión de violencia de unos contra otros.
Que la danza no entiende de idiomas ni de fronteras lo descubriremos en el espectáculo Topa, de Kukai Danza y Brodas Bros, un encuentro entre la danza tradicional vasca y la danza urbana hip-hop, reconocido con numerosos premios en prestigiosos festivales. Con una coreografía muy enérgica y contemporánea, cuatro bailarines tomarán el escenario de la Plaza del Ayuntamiento para entablar un diálogo dancístico entre dos formas de expresión y orígenes distintos. Las calles de la capital de la Ribera Baixa se vestirán también con el movimiento de Brodas Bros y su trabajo coreográfico Solo 2 que plantea la complicidad entre hermanos sin establecer límites entre el hip-hop y la danza contemporánea.
La jornada del sábado culminará con un clásico de la compañía Xarxa Teatre: su exitoso Veles e vents que, tras 25 años de su estreno, nos sigue sorprendiendo. Un grandioso espectáculo, que se desarrollará ya entrada la madrugada en la Plaza Jaime I, que bebe de Ausiàs March para mostrar un mar idílico pero también apocalíptico. Un mar que es fuente de vida y conector de culturas pero también un mar en plena destrucción, convertido en cementerio nuclear y en llamas por las catástrofes petroleras.